domingo, 9 de diciembre de 2012

Volvemos a la brecha

Hola compañeros, después de una larga temporada de ausencia en la red, vuelvo a dar la lata.

A veces hay que dejar la devoción en alas de la obligación, pero a partir de ahora espero que podamos estar en contacto más a menudo.

Tampoco os perdisteis gran cosa desde mi entrada anterior. Las jornadas de pesca se pueden resumir rápido: pocas, muy sufridas y con apenas escama.

Así que mucho peixe no puedo poner, por lo que sobre todo pondré algunas fotos de lances que me gustan…

Como esta de Fran con un sargo aferrado.










 O esta otra tratando de poner el cebo en medio de la espuma.

Soy un enamorado de las puestas de sol, así que os pido que tengáis paciencia con este tipo de fotos, ya que me cuesta no ponerlas.

Lo cierto es que en la mayoría de las jornadas la lubina brilló por su ausencia, lo que no anduvieron escasas fueron las algas, y en casi todas tocó sufrirlas hasta el punto de casi tirar la toalla.


La gran cantidad de algas que había empozadas en las playas, hizo que los sargos se arrimaran a los arenales, por lo que fue la captura más frecuente en nuestras jornadas de surfcasting.

Lubina se tocó poca y aún por encima de tamaño muy escaso que volvía al agua. Aunque alguna buena se puso en tierra como podéis ver en la foto, este año las gordas no quisieron nuestros anzuelos, y excepto Fran, que trincó ese bonito robalo, el resto nos tuvimos que conformar con alguna que otra de poco más de 3 kg y también con alguna que otra pelea con robalos que terminaron ganándonos la partida (supongo que porque eran tímidos y no querían salir en la foto XDDD).




Para terminar este ‘resumen’ desde mi anterior entrada, os pongo la foto de la penúltima salida a playa con Fran, donde como veréis, los sargos ganan a las lubinas por goleada.

No es que me moleste trincar sargos a surfcasting, pero prefiero ponerlos en seco con la bolla, es mil veces más divertido.

Ya casi llegamos a hoy, así que os pongo la foto de mi última salida a bolla. La calada elegida fue esta, si bien está sacada cuando marchaba, ya que llegué de noche.


Monté un 0,26 para la calada, le puse unos 4 metros desde la bolla al anzuelo, bolla sin lastrar, aunque el plomo principal lo puse pegado a ella y un plomín a 3 cuartas del anzuelo. El primer lance lo hice sin apenas luz, lo que hizo que al rato no viera el corcho. Cuando tensé para ver si moviendo la bolla la localizaba, la vara empezó a dar tirones como una loca y puse en tierra un buen sargo. En menos de una hora hice toda la pesca, luego desaparecieron y aunque me moví y toqué puestas con un color precioso en el agua, no volví a saber de ellos. 








Y por  fin, para poneros al día, mi salida de ayer a surfcasting.

A favor que las playas estaban limpias de porquería, lo que ya anima a uno, en contra que el tamaño de las lubinas sigue dejando mucho que desear.

El surfcasting suele ser sacrificado, pero a estas alturas más, que las picadas suelen ser pocas y el frio mucho. Sin embargo, en esta jornada se cumplió más lo segundo que lo primero, ya que hubo bastantes toques de lubina si bien de tamaño escaso. Al final se soltaron unas cuantas y los cuatro que fuimos nos llevamos lubina a casa. Bueno, los cuatro no, que el Jaime se le dio por ser original y fue el único que no las tocó, pero no se puede quejar que marchó con una bonita raya y un rodaballo bien majo.

Se me olvidaba, la playa pescada fue Espiñeirido, aunque la foto no corresponde a dicha playa, ya que las que saqué me salieron movidas y no me gustan (sería por la ansia que tenía después de tanto tiempo sin tocar arena XDDD)


Un saludo compañeros, buena pesca y hasta la próxima.